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Súper Skunk y un paso gigante en Mar del Plata

El fútbol como otras cosas trata de una demostración constante de que todo lo logrado no fue casualidad, de que hay un trabajo y un por qué detrás de cada logro. Escalón por escalón uno siempre quiere superarse y alcanzar nuevas metas, y este año con la implementación de los Regionales y Provinciales sentimos que fue la motivación ideal para diagramar un caminito, tanto para organizadores como jugadores, que nos meta bien entonados y en las mejores condiciones a nuestra queridísima Copa Nacional de Campeones.

Súper Skunk de Ituzaingó fue uno de los elencos nuevos que trajo consigo la segunda mitad del 2019 y se convirtió en un conjunto que le puso un color bárbaro a la movida y que demostró que tiene nivel  para estar entre los mejores de cualquier competencia. “Son otros modales y otras reglas y nos fuimos acostumbrando” nos contó Franquito Larenas después del Provincial y eso ya es todo un logro para nosotros. Sabemos de la competitividad y lo que se pone en juego en los torneos del Gran Buenos Aires y cómo nosotros apuntamos siempre a que en el mejor nivel también puede existir la camaradería, el juego limpio y el respeto entre propios y extraños.

El representante de Líderes en Deportes debutó en el Regional de Trenque Lauquen y se fue con la Copa de Oro en un debut soñado para ellos. Ahora, en un nivel bastante más avanzado, también arrancó con titubeos pero volvió a corregir sus errores para nuevamente irse con la copa en sus brazos. Nada fácil ir mejorando tan rápido sobre la marcha y en una competencia que si te descuidas no te suele perdonar. Algo tendrá Skunk para que al fin y al cabo termine siendo el mejor del torneo.

Llegaron a la acreditación con bombos, banderas y cánticos y con un enorme plantel que lucía cual emblema profesional: ropa de la que te imagines con la impronta del equipo, cantos propios y una delegación numerosa que se hizo ver durante todo el fin de semana.

La pelota comenzó a rodar en Il Catonio y en el primer tiempo se vieron sorprendidos por Frisor Men de Lobos, que con un “10” iluminado como Sebastián Pazos, lo goleaba con holgura de cara al segundo tiempo. Primer duelo y Skunk tuvo que levantar un 6-2 con empuje, pasión y fútbol. 7-6 fue la voltereta que dio el partido para que se grite como si fuera ya el pasaje a Oro a sabiendas de que una derrota en el inicio lo dejaba muy complicado de cara a su proeza de ser el campeón y clasificar al Nacional de febrero. “En los torneos siempre nos pasa que ya queremos jugar la fase de eliminación antes que arranque el grupo”, nos tiró fuera de cámara su DT Marcelo Borelli, que además tiró que los nervios y la adrenalina de estar en una competencia de tamaño nivel y que tanto les gusta hizo de los primeros minutos un arranque complicado.

Por la noche tenían la chance de plantarse mejor y asegurar el primer lugar pero Herrería Higuera de Balcarce también lo durmió de entrada y le ganaba 4-1, cuando en el final la doble S descontó con dos tantos que no le alcanzaron para irse con algún punto pero que al fin y al cabo le dieron la clasificación a la siguiente instancia. Cada gol vale oro cuando se trata de que ingresa algún segundo a Copa de Oro y por goles a favor Súper Skunk terminó entrando en el último lugarcito a la fase “posta”.

El inicio de la jornada final nos decantó un partidazo de esos que sabíamos que el Provincial nos podía ofrecer de antemano. Dos elencos del mismo nivel, campeones de un Regional, se vieron las caras en un gran duelo entre Mariano Moreno de Longchamps y el propio Skunk. El 1-1 quedó corto porque hubo acción en ambos arcos pese a los pocos goles. Lo ganaba el equipo de Maxi Santos con gol de tiro libre de Kevin Maximiliano Montenegro y parecía que cerraba el candado con la tremenda actuación del golero Mariano Walter, pero el picantísimo Pablo Álvarez tuvo la llave del gol y terminó llevando la contienda a los penales.

Allí, Marcelo Saavedra fue el gran protagonista tapando dos remates y festejando luego entre lágrimas con su DT y con su hijo que lo apoyaba detrás del arco. Se festejó como si fuera una final y el Skunk seguía con vida en el torneo: ya estaba en semis donde se cruzó con un elenco cercano como Niupi de Villa Celina. Fue un partido con mucha menos adrenalina pero con más goles, terminando el score 3-2 para los de “Vieta” con un extraño gol en el que un pase por bajo no llegó a desviarse y terminó besando la red y la clasificación –algo así como el gol de Larenas en la final ante Casa Pamqui de Santa Rosa en Trenque-.

La final llegó con sed de revancha porque el rival era el conjunto que le había ganado en la zona: Herrería Higuera, que venía de tachar en los penales al campeón Nacional MB Eventos de Ayacucho. Fue otro cotejo apasionante que fue siempre llevado adelante esta vez por Skunk, que con mucha pasión pegó cuatro gritos de gol y terminó imponiéndose por la mínima (4-3) para superar otra prueba de carácter y fútbol en el más alto nivel. Con el juego de Larenas, la picardía de Álvarez y la alternancia en ofensiva de Iván Mora y Facundo Saavedra, Skunk terminó nuevamente bañado en champagne y con el objetivo cumplido.

Consumada la victoria Larenas nos comentó cómo usaban el torneo para ir encontrando motivación mes a mes y que tras Trenque Lauquen ya metían la cabeza en Mar del Plata y que ahora tienen la dicha de motivarse con ese añorado Nacional de Tandil que cada vez luce más cerca. “Esto es jodidísimo para nosotros porque vamos a estar enfermos hasta febrero y ya empezamos a descontar los días”, agregó el “Loco Vieta”.

Analizando el torneo, el capitán Larenas dijo que “fue muy difícil, un torneo muy duro” que supieron ganar con autocrítica y la corrección de errores. El DT Borelli sumó: “Arrancamos el sábado como en Trenque Lauquen, medio flojito y nos juntamos a la noche y nos propusimos darle con todo el domingo y por suerte se nos dio con un grupo humano espectacular”, valoró.

Sobre el gran partido ante Mariano Moreno, Larenas admitió que sabían que se enfrentaban al primero de la tabla general y que cambiaron el chip: “Si bien empatamos creo que fuimos superiores. No entraba la pelota y se te pasan mil cosas por la cabeza, pensas que podes quedar eliminado pero nunca hay que darnos por muertos porque cuando nos perdonan siempre lo sacamos adelante”, reflexionó.

Por último, el “10” dijo que sabía que tendría revancha contra Herrería Higuera y que le hicieron “un partido completamente distinto aspirando siempre a salir campeón”.

Los cánticos, bombos y bengalas volvieron a aparecer para un festejo alocado y merecido que los deposita en una instancia superior. Y esto es lo más lindo. Cómo un equipo gana un torneo, crece y gana uno más competitivo y luego se le viene la frutilla del postre en el lugar en el que todo futbolista amateur quiere estar. A poco más de dos meses ya vislumbramos un histórico Nacional de Campeones que como cada año es realmente más competitivo y que además de la presencia de elencos de 12 provincias tendrá casi 10 equipos extranjeros. Es cuestión de sumarse y dar la talla deportiva y de conducta, cómo ya lo hizo Súper Skunk de Ituzaingó en este 2019. ¡Felicitaciones!

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