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La Caravana Mágica: el invicto sin corona

Toda una particularidad la andanza del supercampeón tandilense La Caravana Mágica en las Copas Nacional de Campeones. Jugó tres, no perdió ningún partido y no llegó siquiera a disputar una final.

Bicampeones del torneo cuando era de índole regional (2015 y 2016), ganaron las últimas tres A-1 en Tandil y se clasificaron directamente a los duelos de campeones tanto en su localidad como en Mar del Plata. En primera instancia, quedaron afuera en Tandil 2017 con su coterráneo Intocables, cuando en cuartos de final se vieron abatidos en los penales tras igualar 1-1 en el tiempo regular. Unos meses después, con tremendo viaje a Mar del Plata de por medio, volvieron a meterse en la Copa de Oro pero tropezaron con la misma piedra. Tenían controlado el duelo ante Albinoleffe de Longchamps pero terminaron igualando y quedándose con las manos vacías nuevamente en los penales.

Con la chapa de locales nuevamente en Tandil, en marzo pudieron superar ese escollo para meterse entre los cuatro mejores pero nuevamente el karma los acechó, esta vez en semifinales.

En el debut del torneo, arrollaron a Salchichas de Rauch con un contundente 9-1 con la figura de Néstor “Cabezón” Rubilar, mientras que en el segundo turno igualaron en dos con Herrería Daniel Hilguera de Balcarce. Sin La Espiga de Glew, Focusín de Mar del Plata y otros candidatos al título que iban por la otra ronda del torneo, el rojinegro era uno de los favoritos. No sólo por la contundencia que tienen en sus pagos, donde ostentan más de 10 títulos, sino por lo bien que amalgamaron a sus refuerzos en el certamen. En Tandil, los dos mejores jugadores de la historia de la Copa Cosa de Serranos –que llegó a tener casi 200 equipos- son Lucas Porta y Cristian Pérez. El primero, eterno goleador de raza, se perdió el Nacional por lesión por lo que se llamó al segundo, que pertenece a otro equipo, para que lo pueda reemplazar. Además, se sumaron Gonzalo “Pocho” Franco en la ofensiva y Juan Cruz “Pitu” Mouhapé, que suplantó al centrocampista Jorge Weiman, comprometido con Grupo Universitario en el Torneo Federal.

Llegaron los cuartos, esa dura prueba de pasar para La Caravana, y el rival venía entonado y con la “manija” de siempre: Deportivo Estrella de Olavarría llegaba a tope y quería dar la gran sorpresa. Pero La Caravana tuvo un partido extraordinario y lo goleó 6-1 con la figura del “Pocho” Franco.

Día definitivo de competencia y se notaba toda la confianza que había en La Caravana Mágica de llegar al partido decisivo. Primero, le robamos unas palabritas a Cristian Pérez, ese jugador de potrero puro que se prende en todos los torneos amateurs donde lo precisan.

“Para el tipo que no ha llegado a jugar, venir a estos torneos que son tan importantes, que viene gente de afuera y hay un nivel bárbaro de jugadores está muy bueno. Lo lindo del fútbol amateur es que te haces amigos enseguida y dejas esa pasión tratando de ganar cada pelota y salis de la cancha y está todo bien” reflexiona el ex jugador profesional de Santamarina y Aldosivi que estuvo en la Reserva de Boca Juniors.

Sobre La Caravana, un equipo que enfrentó en infinidad de oportunidades y con quien ganó un torneo Senior, destacó que es un equipazo muy bien formado y que él se añadió para sumar “ya sea desde el banco, de entrada o donde toque en esta banda que la verdad son unos genios”.

Por otra parte, valoró la Copa Nacional de Veteranos que jugó en simultáneo y subrayó la organización del torneo: “Cada vez se van especializando más en la organización, cada vez está mucho mejor, metieron muchos equipos de afuera y se subió el nivel. Eso está bueno y te hace ir y querer demostrar contra esos jugadores que se ve que han jugado en otro lados”, finalizó.

Instantes después, nos cruzamos con el DT Nicolás Roldán quien se mostró sumamente confiado de cara a lo que quedaba del torneo: “Nos quedamos en cuartos en Mar del Plata pero las canchas era diferentes y acá de local vamos a hacernos más fuertes que allá”, arrancó.

Siguiendo el relato, destacó que en “La Feliz” se jugaba en cancha techada y que en Tandil tenían el apoyo de toda su gente. “Estamos ansiosos, nerviosos, vamos a ver lo que pasa”, comentaba.

Además de destacar el aporte de los ya mencionados tres refuerzos del equipo, fundamentó que no lo sorprendió ningún elenco del torneo: “No quiero decir ligth pero creo que pueden ser competitivos allá en Mar del Plata pero acá no. No sacaron tanta ventaja como allá y creo que el potencial que tenemos acá en Tandil es muchísimo superior a ellos”, sorprendió.

Más tarde, fue más cauto y anheló “que gane el mejor” sin querer darse como candidato.

Llegó la hora de la verdad y se vio un partido muy parejo. Un equipazo bien armado como Talleres de Longchamps se le plantó muy bien y sin su arquero –suspendido- terminó igualando 2-2 y llevando el cotejo a los penales. Allí, el karma nacional de Caravana se hizo presente y lo dejó con las manos vacías por tercera vez consecutiva, aún sin haber perdido un solo partido. Con un golero rival que en verdad es jugador de campo y les atajó 4 de los 5 penales, La Caravana quedó afuera en casa y se despidió del certamen.

Nuevamente, la ilusión la reflotan en la Copa Cosa de Serranos de Tandil, que le otorgará al campeón de la A-1 un pasaje para una nueva aventura en el Provincial de Mar del Plata de diciembre. ¿Podrá algún tandilense sacarle la corona que alzaron en 5 oportunidades?

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